Entrevista a Emilio Cárdenas

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Por Sonia García

Emilio Cárdenas (Valencia, 1985), es un pintor autodidacta cuya sensibilidad y técnica le han llevado a ocupar un lugar relevante entre los acuarelistas españoles con mayor proyección internacional. Aunque toca todas las técnicas pictóricas, está obteniendo un gran reconocimiento con sus trabajos en acuarela donde destaca por ser un creador de emociones y sensaciones a través de la fuerza expresiva de sus temas y la utilización del color.

Emilio nos presenta una obra fundamentalmente paisajista que raya la abstracción, en la que predomina el interés por las atmósferas y las transparencias, y los juegos de luces y sombras. La acuarela de este artista establece una diferencia con respecto al clasicismo más académico para entrar en un tipo de arte más contemporáneo y más inusual dentro de esta técnica en España.

Acumula más de 80 premios nacionales de pintura y, además de su trabajo más introspectivo y de investigación en su estudio, comparte sus conocimientos en diferentes talleres por toda España.

Hola, Emilio. Eres un pintor autodidacta que está consiguiendo unos altísimos niveles de calidad, ¿cómo comienzas tu camino en la pintura?, ¿tuviste algún referente que te animó a hacerlo?.

Desde muy temprana edad he tenido diferentes inquietudes artísticas en el ámbito plástico, pero mi camino como artista comienza hace unos 15 años cuando decidí explorar al máximo mis capacidades. Al principio trabajaba con óleos, técnicas mixtas y, por último, explorando el camino de la acuarela.

Creo que desde un principio mi padre fue la primera figura o referente que tuve de pequeño porque pintaba óleos en casa y esto, seguramente, fue lo que me animó a empezar con la pintura. Mis referentes fueron pintores del tipo impresionistas, expresionistas y abstractos. Pizarro, Sorolla, Sargent,.. y Tapies o Basquiat son algunos de ellos.

Trabajas con diferentes técnicas, pero centrándonos en la acuarela, ¿qué hace que la elijas frente a otras técnicas para crear una obra en concreto?.

La acuarela, dado que tiene una gran autonomía puesto que fluye entre el papel y mi pincel mediante el agua, da que sea una técnica muy caprichosa, difícil de dominar y, a la vez, mágica y llena de posibilidades. Soy muy impaciente a la hora de pintar y obtener el resultado final y la acuarela te permite un acabado rápido y limpio.

Emilio, ¿cuáles son los colores que nunca faltan en tu paleta?.

Los colores que nunca faltan y con los que más suelo trabajar son los tonos cálidos. Trabajo mucho con tinta neutra, sepia, pardo Van Dyke, amarillo medio y algún azul cobalto o ultramar.

Tienes una sensibilidad exquisita que se refleja en toda tu obra y para mí eres uno de los artistas que mejor expresan el “menos es más”, ¿esa búsqueda de la esencia de lo que nos rodea es el leitmotiv de tu trabajo?.

Efectivamente, siempre me atrajo el hecho de ver una gran masa de pigmentos y tonalidades y grandes gestos sobre el lienzo que, a cierta distancia, creaban visualmente un gran impacto y en mi cerebro dejaban la imagen de un resultado realista. Esto fue motivando cada vez más mi obsesión de querer resumir todo lo que veo y me rodea en su esencia, por ello en mis últimos trabajos he estado trabajando la abstracción, que para mí no es más que una destilación de todo el trabajo que he realizado en síntesis hasta ahora.

¿Qué dirías a la gente que no valora la abstracción como una temática de interés en acuarela?.

Sinceramente creo que excluir alguna técnica o tema por ser de una naturaleza u otra es muy ignorante. Al igual que en la música existen gran variedad de instrumentos y cada uno de ellos puede transmitirnos una emoción diferente, en la pintura sucede exactamente lo mismo.

¿Cómo ves el panorama artístico actual para los artistas jóvenes como tú que están construyendo con esfuerzo y trabajo una carrera sólida?.

No creo que yo sea el mejor ejemplo para dar una visión general desde mi punto de vista. Dedicarse plenamente a la pintura no implica sólo exponer y vender, si no que hay que abrir un abanico de posibilidades. Salidas como impartir talleres o acudir a diferentes eventos para dar a conocer tu obra fuera de las galerías habituales son importantes. Creo que esto es como cualquier empresa, si quieres vivir de la pintura depende de tu trabajo y del mercado dónde ofrecerlo. Nadie tiene la necesidad de comprar obras, con lo cual es un duro trabajo estabilizarse diariamente para adquirir beneficios. Aún así, soy positivo y veo un gran futuro, y me centro más en las experiencias que adquirimos porque esa es la única huella que dejaremos de nuestro paso por este mundo.

¿Tienes programada alguna exposición o evento donde ver tus últimas creaciones?

Actualmente expongo y tengo obra permanente en la Galería Vangar. Aunque mi obra está siendo expuesta más internacionalmente en festivales y colectivas como la última en Lima, Perú.

Mucho éxito en tus proyectos. Muchas gracias, Emilio!!!